Reseña: Wallum (#1) - Marianno Ramoretti

"Dos jóvenes duénagos emprenden un viaje que cambiará sus vidas para siempre. Juntos deberán de recorrer los 12 valles de Eldhor para llegar a su castillo y así poder encontrar su cristal mágico conocido como <<Dysidius>> para poder pedir ese deseo que tanto anhela Wallum, pero antes deberá derrotar a su guardián o morir en el intento.

Wallum y Sniff a través de su recorrido tendrán que superar sus miedos y hacer crecer sus poderes mágicos para lograr una hazaña que dicen las leyendas solo unos cuantos duénagos han logrado alcanzar".

El día de hoy traigo la reseña de la primera parte de una extensa saga escrita por un talento mexicano. Por lo regular, la mayoría de los libros que llegan a mis manos provienen de autores norteamericanos o europeos, así que poder conocer el trabajo de alguien de mi país es algo especial.

Eldhor es una tierra mágica habitada por toda clase de criaturas, se dice que en su castillo hay un poderoso cristal con la capacidad de cumplir cualquier deseo y que Milfrid, el último eldhoriano con vida, es su guardián. Nuestro protagonista es Wallum, un duénago con poco control sobre su magia y que lleva una vida modesta junto a su abuela Amaryllis en un pueblo conocido como Bridavia. Cuando llega a sus oídos la leyenda del cristal, no lo piensa dos veces antes de emprender su viaje junto a su amigo Sniff. El viaje consiste en atravesar doce valles y sus respectivos peligros para finalmente llegar a su destino.

La historia es contada por un narrador observador, quien nos va describiendo cada detalle de la aventura de Wallum a medida que los personajes atraviesan cada uno de los valles. Se acompaña también de una cantidad bastante considerable de diálogos, motivo por el cuál la lectura se vuelve realmente ágil. El lenguaje empleado es sencillo y el autor se ha tomado la libertad de introducir algunas palabras propias de la lengua de sus personajes para definir conceptos específicos que eventualmente aparecen en la trama.

Los escenarios son de lo más diversos, van desde bosques, pasando por desiertos e incluso montañas nevadas, cada uno con su fauna muy particular y que le aportan mucha variedad al desarrollo. Las descripciones no son muy extensas, pero si suficientes para permitirte visualizar la idea que el autor tenía al momento de plasmarla en su libro.

Podríamos decir que el argumento o la idea central no es el punto fuerte de ésta historia, ya que realmente es muy simple, aunque entiendo que está dirigida principalmente a un público más joven. Lo que realmente la vuelve entretenida es descubrir el reto que presenta cada uno de los valles y la forma en que nuestros protagonistas se las ingenian para sortear los peligros, mientras que poco a poco van adquiriendo más experiencia. Sin duda algunas de las escenas de batalla son uno de los aspectos más destacables y que me han transmitido más emoción al momento de leer.

En cuanto a lo personajes, cada uno tiene características que te permiten diferenciar entre uno y otro; sin embargo, he de decir que he echado en falta un desarrollo más profundo, algo que te lleve a empatizar más con ellos y con sus ideales. Lo que me ha gustado es verlos aprender en el camino cosas nuevas y principalmente la inseparable amistad de Wallum y Sniff, ayudándose uno a otro en todo momento y preocupándose por su bienestar. Espero que los personajes que aparezcan en entregas posteriores aporten algo distinto.

Hay un par de detalles que me han sido imposible pasar por alto, observaciones que espero sean de utilidad para el autor. Lo primero es que la narrativa puede llegar a volverse repetitiva en algunas partes, sobretodo cuando no hay acción de por medio y los personajes se encuentran en el trayecto de un valle a otro. Considero que no es necesario explicarnos que los personajes se detienen a comer cada dos por tres o que han tenido que descansar aún cuando ha pasado relativamente poco desde la última vez que lo hicieron. Me hubiera gustado mayor variedad en ese aspecto. Lo segundo, es el uso de un lenguaje demasiado coloquial para mi gusto, que si bien como ya mencioné, es un libro dirigido a un público más joven, pienso que podría manejarse de una manera más neutral, algo que no se vuelva complicado para los niños, pero tampoco demasiado simple para los adultos.

En conclusión, Wallum, como libro introductorio ofrece elementos interesantes, que lo vuelven una lectura entretenida y que principalmente nos da un idea del tono de la saga. Si en los libros posteriores se mantienen los aciertos de este y se hacen algunos ajustes con el objetivo de mejorar, creo que el mundo creado por el autor tiene mucho potencial.

Hasta la próxima reseña.

 

   Bueno